EL HACHA DEL LEÑADOR
Buscando en internet encontré algo que me hizo acordarme de mi
tía abuela Anica. Anica fue una mujer a la que la vida no le sonrió,
una de esas personas anónimas que pasan por la vida como de
puntillas, sin dejar rastro. Huérfana de madre a temprana edad, algo
corta de luces, pequeña y huraña, aun me parece oírla decirme,
arrastrando la elle como antes hablaban en el pueblo:”Chiquilla
come,mira que van a venir esta noche las Animas Benditas, con sus
zapatos con tacón de aguja, y van a bailar encima de tu barriga.”
Nadie la tubo nunca muy en cuenta. Murió soltera, ignoro si alguna
vez tuvo pretendiente. Cuando le preguntaban, tal vez por oírla, por
que no se había casado y tenido hijos, ella decía:”Para que les
caiga el hacha y los mate.”
No sé si ella sabía el cuento al que pertenece
esta frase (yo no), pero siempre respondía lo mismo. Entre nosotros
ha quedado la frase, que yo utilizo algunas veces cuando quiero
referirme a sufrir o a no hacer algo por miedo a lo que pueda pasar,
adelantándose a acontecimientos que no se sabe si sucederán.
Este cuento va en su memoria.
Una muchacha se hallaba sentada junto a un
ventanal observando a un joven y apuesto leñador que se dirigía al
bosque a cumplir con su oficio. Pero la niña, cada vez que lo veía
se sobresaltaba y se echaba a llorar desconsolada. Una vez de estas
entro su tata en la habitación, pillandola en la amargura, le
pregunto a que se debía y ella le contesto:”Cuando pasa el
leñador, el corazón se me encoge, la angustia se apodera de
mi...¡que desgracia tata!” La anciana se pregunta que le puede
haber hecho ese pobre muchacho para producir tal pena en la niña, si
el tiene fama de honrado y es querido y respetado en todos sitios,
siendo el novio que cualquier vecino de la aldea desearía para sus
hijas. Vuelve a preguntarle y esta responde sollozando: “¡ Ay
tata!, ni lo conozco, ni he hablado con el, pero fíjate que me
pretende y yo le digo que si, nos casamos, tenemos un niño y ponemos
la cuna arrimada a la pared, debajo de donde el cuelga el hacha y
esta cae y lo mata.”